SIKTARI




La peculiaridad de este prāāyāma reside en el método de inspiración (puraka). Para ello, hay que abrir la boca un poco, relajando ligeramente la mandíbula inferior y levantando el labio superior un poco. A continuación, se coloca la lengua presionando su punta contra los incisivos superiores de tal forma que sus bordes cubren los molares y los premolares inferiores. Esta disposición de la lengua entre las dos mandíbulas deja una pequeña abertura entre los incisivos superiores e inferiores, por donde se succiona el aire en puraka produciendo un sonido similar a “ssssssiiiiii”. Después de completar la inspiración, la lengua se retira a su posición y los labios se cierran. Se retiene la respiración con los pulmones llenos y se finaliza espirando (recaka) lenta y profundamente por las dos fosas nasales.

Se inspira por la boca 
y se espira por las fosas nasales


ANTIGUOS TEXTOS:

Inspirar por la boca produciendo un sonido sibilante, al mantener la lengua entre los dientes, y espirar a continuación por la nariz; la práctica continuada de ésta técnica vuelve al yogui hermoso como el dios del amor (Kāmadeva). Entonces, se vuelve muy atractivo para las yoguini, controla sus acciones, no siente hambre, ni sed y no se ve afectado por la somnolencia o la pereza. Con esta práctica consigue fuerza física y se convierte en maestro de yoga, libre de todas las desgracias terrenales (Haha Yoga Pradīpikā, 2.54-56).