Chandrabheda,
la respiración lunar, es una técnica de prāṇāyāma
cuyo objetivo es “activar” iḍā
nāḍi, el canal lunar que
termina en la fosa nasal izquierda, activando por este canal la circulación de
prāṇa.
Siempre
se inspira por la izquierda
y se espira por la derecha
Normalmente
con ayuda de mrgi-mudrā
Se
puede realizar con retención del aliento y
el “ritmo respiratorio” = VRTTI que habitualmente realicemos.
Por
tanto, esta práctica activa iḍā
nāḍi, la energía fría psíquica-trascendental,
y desactiva surya nāḍi,
la energía caliente vital. Con la maestría en la ejecución de este prāṇāyāma (si es posible en
baddhapadmāsana), puede ser muy efectivo
para inducir estados meditativos profundos asociados con el despertar de las
energías sutiles.
Si se recomienda sentarse en baddhapadmāsana para ejecutar esta práctica es porque la posición de los brazos cruzados detrás de la espalda estira los hombros y abre el pecho y los pulmones, estimulando importantes marmas o centros energéticos situados debajo de los hombros y que activan los pulmones.
Si se recomienda sentarse en baddhapadmāsana para ejecutar esta práctica es porque la posición de los brazos cruzados detrás de la espalda estira los hombros y abre el pecho y los pulmones, estimulando importantes marmas o centros energéticos situados debajo de los hombros y que activan los pulmones.
ANTIGUOS TEXTOS:
En baddhapadmāsana, el yogui debe inspirar a través de la fosa nasal izquierda, retener el aliento el mayor tiempo posible y espirar a través de la fosa nasal izquierda. Durante la ejecución del prāṇāyāma hay que meditar en el disco luminoso de la luna, como un océano de néctar, de color plateado o blanco como la leche (Gorakṣa Paddhati, 1.96-97).