RESPIRACIÓN COMPLETA


 “Es esencial inspirar y espirar por la nariz”




RESPIRACIÓN ABDOMINAL:
Al inspirar se llena la parte baja de los pulmones, desplazando el diafragma hacia abajo y provocando que el vientre salga hacia fuera. Durante la espiración abdominal el diafragma sube. Al espirar, los pulmones se vacían y ocupan un lugar más restringido. Si es posible vaciar suavemente y al máximo los pulmones. Al relajar el abdomen comienza el proceso de nuevo. Al ejercitar esta respiración acostado boca arriba se favorece la relajación natural de la musculatura abdominal.

RESPIRACIÓN MEDIA O INTERCOSTAL:
Concentrándose en la región baja del tórax y en las costillas flotantes. En la inspiración se llena la región media dilatando el tórax. Los pulmones se expanden y el pecho se ensancha y se levanta ligeramente. Hay mayor resistencia a la entrada del aire.
Al espirar, las costillas se juntan y el pecho se hunde.Para identificarla mejor se puede hacer la prueba de mantener el abdomen ligeramente contraído, con las palmas de las manos situadas sobre las costillas se puede sentir como se separan al inspirar y  se juntan al espirar.

RESPIRACIÓN TORÁCICA SUPERIOR:
Concentrándose en la parte más alta del tórax y en las clavículas. Levantamos el pecho y las clavículas al mismo tiempo que se inspira, sin levantar los hombros y con el cuello relajado. Se nota colocando la palma de la mano en la parte superior del pecho, debajo de la garganta.

RESPIRACIÓN COMPLETA
Integrando las tres se consigue llenar completamente los pulmones y, recíprocamente, vaciarlos de forma total. Esta técnica con bandhas (llaves) se utiliza para la práctica de pranayama.


“Con práctica y tiempo, 
esta técnica se vuelve natural”.